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El azulejo italiano también resiste las subidas de precios y los problemas logísticos inducidos por la pandemia y la guerra de Ucrania. En este sentido, Savorani, Tioli, Fabbri y Verdi, cuyas declaraciones se recogen en un artículo de Ceramic World Web.

La primera contribución importante fue la de Giovanni Savorani, Presidente de Confindustria Ceramica. El conflicto en curso y la incertidumbre sobre el coste y el suministro de materias primas corren el riesgo de ser la "tormenta perfecta" para los azulejos italianos. Esto se debe a que la mayor parte del gas barato procedía de Rusia y, desde el Donbass, llegaban unos 2 millones de toneladas anuales de arcilla, indispensables para la producción.

Sin embargo, a pesar de las premisas, el mercado sigue ofreciendo señales tranquilizadoras. Para el Presidente Savorani, "no sólo estamos trabajando todos a pleno rendimiento hoy, sino que estamos sorprendidos por la respuesta de los clientes, no hemos perdido ningún pedido a pesar del aumento de las listas de precios de entre el 10% y el 20%, que es necesario para recuperar al menos una parte de las subidas de precios.

La adquisición de materias primas

A pesar del escenario de hace unos meses, no se produjo la temida escasez de materias primas. Según Villiam Tioli, Presidente de Caolino Panciera, "el primer barco turco cargado de arcillas, caolines y feldespatos para sustituir a los materiales ucranianos para la producción de gama media atracó en el puerto de Rávena en abril, y otros cuatro llegarán antes de septiembre; mientras que para los productos de gama alta, es decir, las losas, para las que necesitamos materiales de primera calidad, el primer barco procedente de la India ha partido en estos días y ya hemos programado un segundo.

Si, por un lado, las empresas han conseguido asegurarse un suministro "alternativo" tras la crisis del Donbass (que, en cualquier caso, no se resolverá en breve, porque todavía habría que restaurar las infraestructuras), todavía hay problemas y dificultades. En particular,"no sólo porque las arcillas indias son mucho más caras y el tipo de cambio euro-dólar agrava aún más nuestros costes, sino también porque los productores turcos y el gobierno turco empiezan a replegarse ante el aumento de la demanda, imponiendo nuevas autorizaciones de exportación, racionando los suministros y aumentando los precios".

El precio del gas

También persisten las dificultades logísticas sobre el precio del gas. Para Roberto Fabbri, presidente del grupo ABK, "conseguimos encontrar arcilla de calidad similar a la ucraniana en la India, pero nos costó un 40% más y mientras el coste del gas metano se mantenga por debajo de 1 euro por metro cúbico conseguimos trabajar con márgenes que no son negativos. El problema es que si se desencadena un bloqueo total de las importaciones de Rusia, porque hemos calculado que supondría un coste del gas de 1,5 euros, lo que es insostenible para industrias ávidas de energía como la cerámica, con consecuencias catastróficas para la comarca. Durante otros 6-7 meses, el gas ruso es indispensable".

Por otro lado, se espera una respuesta del gobierno para tratar este tema. Para Graziano Verdi, "lo que esperamos del Gobierno es que mantenga su compromiso de reservar el 30% del gas nacional para las empresas gasistas e intensivas en energía a precio de mercado, con un anticipo de 250 millones de euros, que el país devolvería rápidamente, porque extraer gas en nuestro Adriático cuesta 5/6 céntimos/mc, teniendo en cuenta el precio actual de mercado de 1 euro (y los 25 céntimos de hace un año). En nuestro grupo habíamos cubierto los precios del gas, por lo que pudimos preservar los márgenes. Además, estamos completando inversiones puntuales, primero en un cogenerador y ahora en 2 MW de techos fotovoltaicos en la planta de Rubiera para ser totalmente autosuficientes en la parte eléctrica."